En San Carlos de Bolívar, el distrito bonaerense que vive de lleno del campo y de la producción agropecuaria, se está gestando una situación que parece más para un guión de una película de Kohn y Duprat.
Por un lado, los caminos rurales están en pésimo estado. Por el otro, el municipio que debe mantenerlos en condiciones para que los productores puedan trabajar… ¡organiza un rally aprovechando esos mismos caminos rotos!
Primero, el juicio
Todo empezó cuando un grupo de productores rurales del distrito, encabezados por Fernando Ravaglia, le inició un juicio a la intendencia a cargo de Marcos Pisano por el desvío de fondos correspondientes a la tasa vial.
Esa tasa es un aporte que hacen los productores precisamente para que el municipio arregle los caminos rurales. Sin embargo, denuncian que la plata se usó para cualquier cosa menos para eso. El deterioro de la red vial empeoró aún más con las lluvias de este año, dejando rutas de tierra transformadas en “pantanos” y “ríos” intransitables.
En medio de esta crítica situación, y con un expediente judicial avanzando en la Cámara Contencioso Administrativa de Mar del Plata, el municipio sorprendió a todos anunciando —con bombos, platillos y promesas de impacto económico— la organización del Campeonato de Rally Bonaerense para el 2 y 3 de agosto.
Será sobre esos mismos caminos destruidos por los que los productores no pueden sacar sus cosechas, mover maquinarias ni sembrar.